
Hoy es un día de aquellos. En los que se ha puesto a llover sin previo aviso y a lo único que me ha dado tiempo es a guarecerme en una lata de Coca-cola, que si te fijas llega a salir un cachín en la foto. Todo pintaba bastante bien en un principio, iba a esperar que pasase el agucero pacientemente, pero con lo que no contaba es que unos niños confundiesen una lata con una pelota. Desconcertante.
Rodé y rodé, yo, la lata y un resto de Coca-cola sobrante, que con cada patada se sacudía entera, una verdadera pesadilla, que parecía que nunca más iba a acabar. Hasta que por fin recibimos el impacto final. Un choque con el bolón que está justo delante de la lata en la foto. Los niños siguieron camino y nadie más se acercó a patearnos.
De todos modos, más vale ser precavida, en cuanto me desaturdí un poco, salí inmediatamente de tan inoportuno refugio.
Y ahora aquí estoy agazapada tras el bolón. Perdidísima, desorientadísima y pegote por los restos de Coca-cola, aunque no he perdido el ánimo, ya que soy de naturaleza intrépida y aventurera. La verdad no sé que se hace cuando a una le pasa esto en condición de hormiga. He sido desplazada para mi perspectiva el equivalente a kilómetros y kilómetros de mi hogar que ni siquiera sé dónde está. ¿Qué hago?.
2 comments:
What a great site, how do you build such a cool site, its excellent.
»
Hallo I absolutely adore your site. You have beautiful graphics I have ever seen.
»
Post a Comment